Estimadas amigas, estimados amigos de Polígono Sur:
Esta es la última carta que os escribo como comisionada, porque el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía aprobará hoy el nombramiento de una nueva persona para estas responsabilidades, Jaime Bretón, que se incorpora la próxima semana.
Han pasado casi seis años desde que llegué al barrio con la ilusión de unir mis esfuerzos a los de tanta gente que ya estabais aquí en la brecha. No eran tiempos fáciles, porque me incorporé en el punto álgido de la crisis económica, cuando más dramática era la ecuación entre el incremento de las necesidades de la población y la merma de los recursos para atenderlas, cuando más difícil era sostener la esperanza en la transformación de este barrio.
Hicimos de la necesidad virtud y nos dispusimos a trabajar de la mano para compensar tantas carencias, para poder mirar a los viejos problemas de Polígono Sur con ojos nuevos y para buscar soluciones sumando esfuerzos. Por ello, en estos años hemos ido avanzando en recuperar el trabajo en equipo, en compartir objetivos y tareas, en componer un modo colaborativo de enfrentar los retos de Polígono Sur. Nuestras redes de Empleo y apoyo al Emprendimiento, de Entidades que trabajan con Familia e Infancia, de Trabajo de Calle o de Igualdad, son hoy herramientas fundamentales del barrio. Podemos decir lo mismo de la Mesa de Vivienda, la Mesa de Protección de Infancia o los órganos y grupos operativos del Plan Educativo de Zona entre otros.
Cuando llegué a este barrio me preocupaba especialmente la atención a la infancia, y me voy con la satisfacción de haber impulsado un trabajo de coordinación con las entidades y personas volcadas en mejorar la vida de los niños y niñas más vulnerables, que ya ha dado frutos, y que ha abierto un camino que permitirá ahondar en las oportunidades que ofrecemos a menores y jóvenes del barrio. Me parecía también muy injusta la visión llena de prejuicios que desde fuera se tiene de Polígono Sur, y creo que hemos conseguido dar visibilidad a muchas de las facetas positivas de este barrio, y a la fuerza con la que toda nuestra comunidad se esfuerza por mejorar, en especial muchos de nuestros vecinos y vecinas.
Por todo ello siento tanto orgullo como reconocimiento a todas y cada una de las personas e instituciones que habéis contribuido con vuestro esfuerzo y buena disposición a hacer avanzar el Plan Integral. Desde las personas que han compuesto mi propio equipo y a las que nunca terminaré de agradecer su esfuerzo, sabiduría y dedicación, hasta quienes habéis trabajado desde servicios públicos y entidades privadas, demostrando cada día de modo admirable vuestra profesionalidad y compromiso con este barrio y su población, pasando por nuestras vecinas y vecinos, en permanente lucha por hacer que Polígono Sur se convierta en el barrio que anhelan, y dándonos con ello una lección admirable.
También en este tiempo hemos visto hacerse realidad algunos sueños del barrio, al impulso de las inversiones de distintas administraciones: la apertura de Factoría Cultural, del Centro de Participación Activa de Mayores o el parque Guadaíra; la rehabilitación de las grandes avenidas del barrio o la conversión de espacios baldíos en plazas; la reapertura del Centro de Orientación y Dinamización para el Empleo (CODE), el traslado y la regularización del mercadillo ambulante o la rehabilitación de bloques de viviendas, entre otros. No conseguimos, a pesar de nuestro empuje, que la comisaría se construyera dentro del barrio, pero esperamos que pronto sea realidad un dispositivo de seguridad integrado dentro de él.
Aún así, los problemas de Polígono Sur siguen siendo muchos e ingentes, agravados por la gestión que se hizo de la crisis financiera, que ha afectado especialmente a la población en exclusión severa. Me llevo la preocupación de que nuestros esfuerzos y nuestro trabajo no hayan conseguido transformar de forma más importante el barrio, pero también la conciencia de que la solución no puede llegar únicamente con el buen trabajo que se haga desde dentro: hace falta una apuesta más radical de las distintas administraciones para poder cambiar la realidad de exclusión. Tengo la esperanza de que el nuevo ciclo político que se abre a nivel local, autonómico, nacional y hasta europeo traiga nuevos y definitivos impulsos en la lucha contra la exclusión. Deseo a quien me sucede toda la suerte y el acierto en el liderazgo de esta nueva etapa, así como los apoyos imprescindibles por parte de las administraciones. El vuestro estoy segura de que lo tendrá.
Por mi parte, me vuelvo a la Facultad de Psicología de la Universidad de Sevilla, como os dije cuando llegué. Allí me encontraréis para lo que queráis. Me vuelvo cargada de aprendizajes y de agradecimiento por lo vivido y compartido, sintiendo que una parte de mi corazón se queda para siempre en el Polígono Sur.
Un abrazo cálido de vuestra comisionada,
Mar González
